jueves, 4 de junio de 2009

Nada con la indiferencia: A propósito del friaje que ya cobró víctimas


Y tú…¿ya tomaste conciencia?

Encontré esta foto en Google, ahí también reciben donaciones:


Para nadie es novedad que en estos últimos días se habla de la fuerte ola de friaje que atraviesa Puno y el sur del país, la cual está cobrando muchas victimas, sobretodo niños, pero… ¿algo estamos haciendo nosotros?

Hasta hace poco nadie se daba por enterado de este tema, ni lo mencionaban, pese a que se sabía de la problemática que no es solo de este año ya que viene de años atrás, tan solo en las calles y los medios se hablaba de la mal llamada gripe porcina; y, pienso yo, más importante es ayudar a esta gente que sufre las inclemencias del frío, así que he comenzado a seguir la campaña que quiere apoyar a todas las personas que sufren esta fuerte ola de frío y que afecta sobretodo a los niños. El primero que empezó fue Marco Sifuentes desde El útero de Marita, luego vía Twitter Gianmarco siguió con la idea, ahora también por esa misma vía Bruno Pinasco convoca a la gente a dejar ropita en el canal donde trabaja (América TV). Luego, hoy revisando las actualizaciones de mis blogs favoritos, veo que Mónica en Avoid the void también toca el tema y hace referencia a un blogger que ha estado tocando el tema mucho más incluso que los medios de comunicación, denle una chequeada. Asimismo, encontré esta campaña que está efectuando Cáritas, la cual salió en la web de RPP. Sin embargo, la donación de ropa lamentablemente no es la solución; acá lo crítico es que las condiciones de vida y vivienda de los sureños no son las adecuadas para las temperaturas tan bajas que se registran, en una web de la PUCP explican esto más al detalle y proponen una solución. A ver si las autoridades hacen algo, ¿no creen? Yo creo que con mis impuestos (y los tuyos) se puede mejorar la calidad de vida de estos pobladores, esperemos.

Ahora, hasta en la chamba nos han mandado el afiche de ayuda; genial porque justo mi mamá ayer me preguntó si ya estaban haciendo campaña de recolección de ropa, pero en los canales de tele, municipalidades y por otros lares están uniendo fuerza para que te animes a apoyar. VAMOS!!!


Todo esto me hizo pensar algo que me ha venido a la mente hace más de un mes: ¿Por qué a veces somos indiferentes ante la pena y desgracia? Nada nos cuesta ayudar, además es gratificante. Lo que pasa es que yo en estos últimos meses he sentido que me he vuelto indiferente ante todo, me parece extraño, pero de la nada la vida me ha llevado a ese estado, pese a que o me gusta ser así. Como uno se siente aparentemente cómodo con la vida que lleva, no te conmueve ni en 1% el dolor y sufrimiento ajeno, no nos ponemos en el lado del otro porque aparentemente lo tenemos todo y creemos que no nos va a pasar nada. A veces una vida monótona, abrumada por el trabajo, en tiempos donde es cada vez más difícil ver a los amigos, donde otros tantos se alejan por a, b o c motivos (buenos y malos claro está), donde vivo en mi cubículo y yo sola tomo las decisiones hace que no te detengas y pienses en el otro, ese individuo que es tan igual a ti, pese a que no está siendo tan favorecido como tú. Estaba leyendo hace un rato a Inés Temple y me gustó su penúltimo artículo donde dice que se debe tener un equilibrio entre lo personal y lo laboral. La verdad yo no lo he buscado, quizá porque no tengo novio, trabajo muchas veces sin parar, me pongo a estudiar lo que encuentro, porque convivo entre ambientes donde a veces uno se desarrolla con gente individualista, parca e indiferente, porque cada vez es más difícil reunirse con las amigas, no me pongo a pensar en que los días pasan como si nada y lo peor de todo, no he buscado algo para cambiar eso. Bueno, digamos que ahora sí, un poco; pero no como antes, cuando iba al spinning y cuando estaba metida en el voluntariado, visitando niños, abuelitos y me daba más tiempo para todo, en fin.

Ya que hablo de solidaridad y voluntariado, me acordé de lo único bueno que me dejó mi anterior centro laboral: el haber ido a Aprendo Contigo. Les explico: este es un voluntariado que consiste en nivelar a los niños con sus clases de colegio para que en el periodo entre su enfermedad y la recuperación no pierdan su año escolar y puedan regresar al colegio con normalidad. Yo no soy profesora, soy contadora, que con las justas saca tasas de interés y analiza estados financieros, que iría a enseñar, nada!!!Pero este programa, que trabaja en La Posadita del buen Pastor, el Hogar San Juan de Dios y el Hospital Neoplásicas (donde iba yo), tiene un voluntariado corporativo, en el cual los empleados de diversas empresas pueden realizar voluntariado sin pasar el riguroso proceso para que puedas calificar como una “profesora de verde”, que es como se les llama a las voluntarias. Les pongo el vídeo de presentación del programa para que lo conozcan:



Cada vez que veo este video me quiebro, me dan ganas de volver, ahí cada sábado por la mañana, mientras jugaba con los bebes y niños me olvidaba de mis problemas, esos que frente a esa espantosa enfermedad llamada cáncer se hacían minúsculos, agua, desaparecían (es que uno cree que sus problemas son lo único en el mundo, cuanta equivocación!!!). De estos niños aprendes fuerza, coraje, tienen unas ganas de salir adelante única, además te dan todo su cariño, más que cualquier amiga (no exagero!!!). Extraño que me digan profesora, que me abracen y no quieran que me vaya, sus risas, sus juegos, todo…creo que ha sido la experiencia más linda que he podido vivir.

Mientras pienso como hago para ingeniármelas y volver a Neoplásicas, solo puedo en este momento balancear mi vida estando en un concurso de ideas voluntarias sostenibles en el tiempo, ayudando a alguien haciéndole ver que me importa mucho y poniéndome feliz de sus logros, bailando con ligera torpeza pero divirtiéndome y armándome de valor para volver a correr y llegar a la 10K. Ahora sí, los dejo y por favor no se olviden de estar pendientes de la campaña del friaje, todos podemos ayudar, acá no hay pretextos.

BONUS TRACK.
Totalmente hueca y losa, pero en estos últimos días me he reconciliado con mi pelo, de nuevo lo veo bonito y ya no me desespera tanto; sin embargo me sigo despeinando muchísimo, hasta porque me da el aire, adiós peinado, jejeje. Sin embargo; así como me río de mi torpeza al bailar salsa, me tomo con humor el temita de que ande despeinada, por eso les pongo mi canción. Esta es la versión de Los Holligans. Casi me pongo a bailar en mi cubículo, jajajaja:




Como quiero volver a Neoplásicas!!!Pero ya no tengo tiempo por mis clases, caray!!!

0 persona(s) opina(n):

 

Escribiendo la nada Copyright © 2009 Flower Garden is Designed by Ipietoon for Tadpole's Notez Flower Image by Dapino

Creative Commons License
Escribiendo la nada by Malu is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-Sin obras derivadas 2.5 Perú License.